En noviembre de 2025, un equipo de investigadores del MIT logró un avance importante en el campo de la superconductividad cuántica: han encontrado evidencia directa de un comportamiento superconductivo no convencional en grafeno especialmente dispuesto (conocido como “magic-angle twisted trilayer graphene” o MATTG).
¿Qué han descubierto?
La novedad radica en que, mediante una técnica de espectroscopía de túnel, los investigadores midieron el “gap” (brecha de energía) característico de la superconductividad y observaron que tiene una forma en V muy marcada. Esto sugiere un mecanismo distinto al de los superconductores convencionales, donde los pares de electrones (Cooper) se forman debido a vibraciones de la red cristalina: aquí parece que la colaboración entre electrones es más fuerte, sin depender tanto de esas vibraciones.
Además, los investigadores desarrollaron un sistema experimental que les permitió observar directamente cómo se forma esa brecha superconductora en materiales bidimensionales y en condiciones variables de temperatura y campo magnético.

¿Por qué es relevante?
Este resultado no solo es un logro científico, sino un paso para descubrimientos más avanzados de la superconductividad: encontrar materiales que operen a temperaturas más altas, incluso cercanas al ambiente, con resistencia eléctrica prácticamente nula. Eso podría revolucionar muchas tecnologías:
1. Energía sin pérdidas
Los superconductores permiten que la electricidad fluya sin resistencia, es decir, sin pérdida de energía.
Esto sería revolucionario para:
- Redes eléctricas más eficientes.
- Menos calentamiento en cables y dispositivos.
- Transmisión de energía a largas distancias sin desperdicio.
2. Tecnología médica más accesible
Equipos como las máquinas de resonancia magnética (MRI) usan superconductores.
Si estos funcionaran a temperaturas más altas:
- Los equipos serían más baratos.
- Consumirían menos energía.
- Podrían instalarse en más hospitales.
3. Computación cuántica más práctica
Los superconductores son fundamentales para muchos tipos de qubits. Un superconductor más estable:
- Aumentaría la fiabilidad de los qubits.
- Reduciría la complejidad de enfriamiento extremo.
- Facilitaría computadoras cuánticas más pequeñas, eficientes y accesibles.
4. Transporte futurista
Tecnologías como los trenes maglev y posibles soluciones de transporte por levitación podrían volverse:
- Más económicas
- Más estables
- Más fáciles de implementar
Gracias al efecto Meissner (levitación magnética superconductora).
5. Electrónica avanzada
Un superconductor más “simple” o usable en condiciones menos extremas permitiría:
- Dispositivos más rápidos.
- Circuitos ultraconductivos.
- Mejor eficiencia energética en chips especializados.
6. Impulso científico y de ingeniería
Cada avance en superconductividad abre puertas a:
- Nuevas teorías sobre cómo se comporta la materia.
- Nuevos materiales y métodos de fabricación.
- Desarrollo acelerado de tecnologías cuánticas y energéticas.
Otras líneas de investigación paralelas
Este descubrimiento se alinea con otros esfuerzos recientes en física teórica y aplicada:
- Teóricos de la Queen Mary University of London han propuesto que la superconductividad a temperatura ambiente es posible dentro de las leyes fundamentales del universo, relacionando dicha temperatura crítica a constantes físicas fundamentales como la masa del electrón y la constante de Planck.
- Por su parte, científicos de la Penn State han desarrollado un nuevo modelo (basado en lo que llaman “zentropy theory”) para predecir qué materiales podrían volverse superconductores a temperaturas más altas, uniendo la física cuántica con la teoría clásica de superconductores.
Los Retos a Afrontar
Aunque el avance del MIT es muy prometedor, no significa que ya tengamos un superconductor práctico a temperatura ambiente. Todavía hay muchos obstáculos:
- El experimento se hace en condiciones muy controladas y con materiales “exóticos” (grafeno muy delgado, capas perfectamente alineadas).
- No está claro si este tipo de superconductividad se puede escalar o adaptar a materiales más fáciles de fabricar.
- El mecanismo exacto de emparejamiento electrónico aún no está completamente comprendido, lo que complica diseñar materiales “a la medida”.
Sin embargo, este tipo de investigación abre nuevas rutas de diseño. Saber que existen superconductores no convencionales con estas propiedades permite soñar con aplicaciones más factibles en el futuro.
Conclusión
El hallazgo del MIT sobre el grafeno mágico es un ejemplo excelente de cómo la física fundamental puede conducir a tecnologías disruptivas. Si se logra aprovechar este tipo de superconductividad en materiales prácticos, podríamos estar frente a una transformación radical en cómo generamos, distribuimos y usamos la energía, así como en el desarrollo de la computación del futuro.

















